viernes, junio 05, 2015

Príncipe sin trono (o cómo cambiar la mente)


Agrupadas en sal están las meteduras de pata. Agrupadas en azafrán las esquinas del corazón olvidadas. Agrupadas en canela están las mentiras de hojalata. Pero lo que yo necesito son ajos para matar la tirania de los vampiros costumbristas. Siempre la misma pompa. Siempre la misma mirada altiva. ¡ Qué se mueran! ¡Qué se mueran todos menors tres!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Rosa, Pinín y la Cordera...
me suena a terciopelo verde..
a rastrojo de amapolas bucaneras
dándome un abrazo

Un brazo

La polilla sumisa)


vomiton dijo...

gracinas!