CAQUILANDIA I

Aviso, que esto puede herir las sensibilidades....de los extreñidos


Mierda. Caca. Boñiga. Truño. Excremento. Tordo. Mojón. Sorete. Cohete. Si, compañeros (no sé de qué,jeje), esta semana es la semana de la “MIERDA”. Hablaré de la caca. Así de simple. Yo me quedé en la fase caca-culo-pedo-pis: no puedo evitar una sonrisa cuando oigo alguna de estas palabras. Para hablar de la mierda, hemos de situarnos en Caquilandia, el pais apestoso. Allí no son ajenos a las nuevas tendencias culinarias que la sociedad occidental está logrando imponer. Así, pues, veamos cual es el menú en uno de los Restaurantes de Caquilandia.

"Estamos para servirle"

Primeros platos:
-Arroz negro. Nada de tinta de calamar. La preparación es sencilla. El arroz se hace como siempre. Pero en vez de calamar, se utiliza el ano y lo que sale de el. Sin compasión. Se unen los dos ¿productos? y voilà.

-Ajos tiernos con mollejas y tordos escalfados. Nada de huevos, que tienen mucho colesterol. Se sustituye por tordos. De cualquier tipo, mientras sean duros.

-Pimientos del Piquillo rellenos de turnillos. Ideal para los que hacen caca a ritmo de breackdance (o morse). Un truño grande no sirve, que luego hay que cortarlo y mancha.

-Revuelto de habas con mojón. Limpio y rápido, se defeca encima del plato directamente. Plato premiado en el Festival de Montreal. Dice su protagonista que se inspiró en Pollock, la comida estalla ante el plato, como lo hace la pintura sobre un lienzo o las notas en una canción de jazz.

-Estofado de cagado. Cuando el cocinero va suelto, siempre hay este plato. Y si, con suerte, ha comido samfaina el dia anterior, tropezones de pimiento rojo tendrás.

Segundos platos:

-Carpaccio de fístula. Este me da tanto asco que no me atrevo ni ha describirlo.

-Croquetas de pus. Se coge la mierda, se rellena con pus, y se reboza. Importante que la caquita esté un poco dura.


-Lubina al truño blanco. Fermentamos un truñete blanco con agua. Con el resultado, y después de freir la lubina, la sazonamos con el líquido de truñete blanco. Ideal para cenas románticas.

-Redondo de tordo a la jardinera. Para los insaciables. Ideal para los que hacen caca estilo “lingote de oro”. Luego se parte en rodajitas, y tenemos un sabroso redondo. Se llama a la jardinera porqué su creador lo inventó en el jardín de su casa. Tenía que abonar los geranios y le salió un delicioso plato.

Postres:

-Sorete de limón. Metemos el sorete dos días antes en el congelador. Al sacarlo, lo rayamos y le añadimos zumo de limón. Ideal para bajar la comida.

-Suflé de truñé. Se deposita la boñiga en el horno a 250 durante media hora. le ponemos rayadura de naranja por encima y ya está listo.

-Tarta sorpresa. Una espiral de sabores. Cogemos truños de todas clases y se separan por clases. En la primera capa, pondremos los duros. En la segunda, las caquitas blancas. Y en la tercera, la mierdecilla blandita. Enfriamos durante 2 horas y...uhmmm, delicioso.


Bueno, pues este es un resumen de lo que se cuece en uno de los restaurantes más chics de Caquilandia. Si Ferran Adrià puede, por qué ellos no?