miércoles, abril 15, 2015

A veces salen


Un espíritu azul deambula en un mar de pupilas y flequillos. Se rige sin rigor y la brisa es su compañera. Pero ésta le lleva tan lejos que tiene que dormir en la calle porque no hay transporte de vuelta hasta el día siguiente.


p.d.: Y no tiene saldo ni wi-fi en el mobil (para hacerlo más realista)

1 comentario:

Mothman dijo...

Teletransportado, al día siguiente,
swupe del azul de tus congojos. Este, me gusta mucho, dormilón.