martes, febrero 05, 2008

Cuelpo


Amaneció una retorcida espalda de su espalda. Emergía más y más hasta hacerlo caer al suelo. Y ahora estaba mirando al insípido cielo deseando no volver a cerrar los ojos.

1 comentario:

Cristina dijo...

Qué miedo da esa foto... Muy siniestra. La mirada de la niña lo dice todo, jajajaja

Por cierto, noticias sobre trabajo?