Recorremos a un par de insultos más un par de provocaciones vacías y a una irreverencia insultante. Lástima que sólo estemos tú y yo en esta nevera
¡Vaya! ¿Otro post sexual?
Pues la verdad es que no, no iban por ahí los tiros. En realidad, no sabría decir si el protagonista está sólo en la nevera o acompañado. Supongo que depende del día, o de esa brisa que te hace sentir vivo cuando los demonios interiores (sí, esos del departamento de reclamaciones) se mecen de una manera apacible, mientras los rayos solares tergiversan su versión de la luna.
Una verdad, dos mentiras, bla,bla,bla...
Gregoria, de Burgos, nos pregunta hoy si podremos viajar al futuro
Yo digo que sí, dentro de una nevera.
¡Ajá! ¿por dónde van ahora los tiros?
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